Actividades para las Personas Mayores, talleres artísticos culturales, baile entretenido, clases de kárate y aerobox son algunas de las actividades que se realizan cada semana en esta unidad vecinal y que tienen una muy concurrida asistencia. Su administración aproxima que cerca de 2.300 personas son las que participan activamente.

Creada en 1967, desde hace unos años que se propusieron como tarea potenciar al Club de Adulto Mayor Renacer del Ocaso para re encantar a las Personas Mayores del sector, para lograr que se activen nuevamente, dejen en parte la soledad y se atrevan a compartir.

“Hemos logrado reintegrar y re encantar a las Personas Mayores para que se acerquen y que salgan de sus casas. Llega una edad donde a las Personas Mayores les da miedo salir de su hogar, por la delincuencia, la invalidez….hemos logrado que vuelvan a vivir de cierta forma”, cuenta a Revista La Voz de los Mayores Teresilda Sura Villegas de la Unidad Vecinal y tesorera del club.

Cada martes de la semana las Personas Mayores se juntan a compartir, jugar bingo, tomar onces, charlar, reírse y pasarlo bien un rato. También reciben visitas con información útil para ellos, como el Cesfam que hace charlas constantes, o la caja de compensación que informa de sus beneficios. En esta oportunidad como ANAMCHILE los visitamos para contarles de nuestra asociación, de la importancia de revalorar a la Persona Mayor como una persona que aporta a la sociedad y de la necesidad de unirse para ser escuchados. También se les regaló el último ejemplar de nuestra revista. En la visita nos acompañó Jurel Único, que les informó sobre los beneficios de este alimento, de las variedades que comercializan y de las ricas formas que hay para prepararlo. Por último, les entregaron tarros de Jurel Único para que los prepararan en su hogar.

Finalmente, para Teresilda está clarísimo que esto que hacen es solo una pequeñísima ayuda para enfrentar mejor la vejez. Sin lugar a dudas, las tareas de mayor impacto están al nivel de las autoridades. “Los gobiernos y las instituciones públicas se han preocupado harto por las Personas Mayores, pero sólo de palabra…no han hecho nada más. Es importante mejorar las pensiones, tener mejor salud (aunque hay que reconocer lo bueno que es que los consultorios vayan a atender a domicilio), preocuparse de la soledad que muchos viven, hay muchísima gente que no tiene a nadie que lo vaya a ver”, reflexiona.