SALUD

SALUD. LA IMPORTANCIA DE LA VITAMINA D.

Dra. María Magdalena Vidal.

La vitamina D es una vitamina liposoluble y actualmente es considerada una hormona porque actúa en prácticamente todos los órganos y sistemas del organismo.

 

Se obtiene principalmente a través de los rayos UVB de la luz solar, y también se puede ingerir en algunos alimentos como pescados, huevo, aceite de hígado bacalao, leche fortificada. Una vez absorbida a través de la piel o ingerida a través de los alimentos, la vitamina D sufre algunos procesos metabólicos tanto en Hígado transformándose en Calcidiol, como en Riñón donde se transforma en Calcitriol (forma activa). Promoviendo la absorción intestinal del Calcio.

 

La vitamina D es muy importante en nuestro organismo, actúa en el metabolismo del Calcio y del fosforo, ayudando a mejorar la salud del sistema osteomuscular, es decir mejorando la salud de los huesos y contribuyendo a mejorar el tono de los músculos haciéndolos más fuertes. Además de disminuir el riesgo de osteoporosis. Esta vitamina tambien ha sido ampliamente evaluada y se ha visto que su déficit en el sistema inmunológico puede contribuir al riesgo de las infecciones respiratorias, así como a enfermedades autoinmunes. También se ha evaluado su relación con la depresión.

 

La defi­ciencia de vitamina D es un problema que afecta a todo el mundo, se podría llamar “la nueva pandemia”, ya que se ha visto déficit de vitamina D a diferentes latitudes, tanto en países tropicales como en países Nórdicos y en Chile existe déficit a lo largo de todo el país, viéndose incrementado este déficit por una serie de factores: dentro de ellos está  la síntesis de vitamina D en la piel, que depende de la intensidad y del tiempo de exposición a la luz solar a la que se somete un individuo, viéndose afectada por  factores personales  como la edad, la cual a medida que aumenta va produciendo una disminución en la síntesis cutánea. A medida que pasa el año, también cambia nuestra exposición solar, así vemos que en invierno no nos exponemos a los rayos solares, estamos dentro de casa y hay poca Luz solar, y en verano utilizamos protectores solares para protegernos del cáncer cutáneo y no nos exponemos al sol. La tendencia a vivir en ciudades con edificios elevados, que pueden obstaculizar la radiación del sol, el confinamiento en el caso de ancianos o personas con movilidad reducida, el tipo de ocupación o realizar pocas actividades al aire libre, son factores que pueden contribuir a que la piel encuentre dificultades para la síntesis de vitamina D y el confinamiento producido por el COVID 19 también agravó esta pobre exposición al sol. La obesidad es otro factor predisponente al déficit de vitamina D y si a esto sumamos que el aporte de vitamina D a través de la dieta es muy pobre ya que para lograr los requerimientos de vitamina D diarios tendríamos que consumir varios huevos al día, todos los días, o comer pescado graso (como el bacalao) todos los días, y sabiendo que esto no es posible, por ello, existe una gran probabilidad de tener déficit de vitamina D, por lo mismo es importante consultar con su médico para evaluar cómo están sus niveles de vitamina D.