PARA ENVEJECER BIEN

Conozca las condiciones y hábitos que hacen tener una mejor ancianidad

Desde 1994 la Sociedad de Geriatría y Gerontología de Chile ha venido desarrollando como misión desarrollar las mejores condiciones para el envejecimiento de la persona y su entorno, de manera humanizada a través del trabajo en equipo, con altos estándares de calidad, involucrando a todos los actores relevantes. Su actual presidente, Dr. Gerardo Fasce P., nos conversa sobre las personas mayores en Chile y entrega conceptos para vivir más y mejor.

Las personas mayores en Chile actualmente superan los 4 millones de habitantes, y las últimas proyecciones estadísticas dicen que para el año 2050 en Chile van a existir más de 6,5 millones de personas mayores. Estos datos claramente ratifican la importancia de este segmento en nuestro país.

 

Todas las estadísticas que se han hecho han quedado cortas. Cuando hemos realizado proyecciones vinculadas al envejecimiento hemos quedado cortos. Todo lo que pasó Europa en su proceso de envejecimiento que duró cerca de 250 años en Chile está pasando en 50 años. Así que es probable que para el año 2050 en Chile existan mucho más de 6 millones de adultos mayores. Y el tema es qué las medidas para prolongar la sobrevida son medidas que se hicieron a mitad del siglo pasado. La pega hoy día es mejorar la calidad de sobrevida. Y ahí estamos al debe.

 

 

¿Cómo ve que ha cambiado la situación de la salud integral de las personas mayores? ¿Qué cambios ha visto positivos o negativos con respecto a años atrás?

 

Lo primero es que hoy existe más conciencia de que los adultos mayores son un grupo grande que está creciendo y qué es necesario tener una forma de atención en salud distinta. Se han generado una serie de iniciativas en los últimos 15 años pero en general destructuradas. Y cuando las iniciativas son destructuradas, cuesta que el sistema funcione en forma eficiente. Entonces se da muchas veces que primero a una persona la atienden en un lugar y luego debe ir a otro lugar más lejos para que la sigan atendiendo. Al final termina pareciendo como una pelota de “ping pong” sin coordinación en los horarios.

Entonces de esto hoy en día hay conciencia y se están generando cambios. Primero, sistemas que funcionen de una mejor forma en cuanto los procesos. Por lo menos el diagnóstico ya está hecho. Segundo, se está actualizando el cómo se medían las cosas es decir que ya se generó conocimiento que demostró que los parámetros que las variables que antes se medían no son las más importantes y entonces se actualizaron. Estas nuevas variables nos van a decir de una mejor forma como está una persona. Tercero se están generando estructuras o modelos de cuidado a nivel país como políticas de salud pública. Hoy día hay unidades de hospitalización que ya están empezando a crecer, se están mejorando los estándares de funcionamiento de los establecimientos de larga estadía, se está modificando la evaluación médica preventiva del adulto mayor, es decir, se está generando un funcionamiento que en los próximos años va a dar sus beneficios. Vamos a poder hacer un mejor diagnóstico de cómo está la salud de las personas mayores y en base a eso hacer planes para poder llegar a darles una mejor y más oportuna atención médica. Por último, diría como resumen que el diagnóstico es positivo, pues se ve que ha existido un avance en cómo mirar a las personas mayores en el ámbito de la salud.

 

 

Con respecto a las enfermedades que sufren las personas mayores, ¿prevalecen las mismas hoy en día que las de hace 5 ó 10 años o han ido cambiando?

 

Empiezan a aumentar las enfermedades que son propios de países que tienen mayor expectativa de vida. Si yo sobrevivo más tiempo, más existe la probabilidad de que aparezcan enfermedades que una persona no alcanzaba a tenerlas porque fallecía antes. Si bien es cierto que las enfermedades al corazón y las cerebrovasculares siguen teniendo prevalencia, está aumentando progresivamente el cáncer qué tiene que ver con hábitos que no son muy buenos. Esta característica va en línea también con lo que ha pasado en otros países más desarrollado. Después, la gente se da cuenta que hay que cambiar esos hábitos. Esto esperamos que se dé en Chile, y que sea en menos tiempo de lo que demoró que pasara en los países más desarrollados.

También, las enfermedades degenerativas como las demencias están aumentando. Entonces estamos en presencia de enfermedades que son complejas que requieren para enfrentarlas también una estructura sanitaria más potente, y dónde probablemente hay que poner mucho más énfasis en los niños, en los jóvenes, en los adultos, en la prevención. Cómo doctor no saco mucho atender a una persona de 80 años en la consulta porque ya pasaron muchas cosas en su salud. Si queremos que una persona tenga una buena vejez a los 80, 90 ó 100 años, hay que prevenir. Hay que hacerlo a los 30, a los 40, a los 50 años. Este concepto de prevención también los estamos entendiendo, es decir que para tener una buena vejez hay que tener controles de salud periódicos antes de llegar a la tercera edad. Y también es necesario que cuando niño a uno le enseñan bien qué es la vejez, cuáles son las conductas y los hábitos que tengo que ir desarrollando en la vida para tener una buena senectud.

 

 

¿Qué hábitos tienen que tener las personas mayores para mantener una buena salud integral?

 

Se han visto zonas en el mundo donde se concentra una población de adulto mayor mucho más longeva que en otras partes. Y todas tienen en común una serie de determinantes.

Uno, no comen leseras. Son zonas semi rurales, por lo tanto la alimentación que tienen es sin alimentos procesados. Y la mayoría de los insumos alimenticios  son por ellos mismos cosechados.

Segundo, son físicamente activos, es decir, se mueven.

Tercero, tienen muy bajas tasas de estrés. Duermen bien, están más tranquilos.

Cuarto, son reconocidos en su sistema social. Este reconocimiento se ve muy presente en los pueblos originarios en Chile, donde los adultos mayores tienen un reconocimiento y son personas importantes dentro de su rol social.

Y quinto, siguen siendo útiles, es decir están vigentes. Es decir, las personas mayores siguen teniendo un sentido para despertarse todos los días y funcionar. Se sienten que aún son un aporte.